Filiberto Bedolla
En estas fechas pasadas en que hemos conmemorado nuestra Independencia y hoy nuestra revolución gracias al sacrificio, heroísmo puro, y triunfo de aquellos héroes que lucharon para que hoy disfrutemos de paz, autonomía territorial, en consecuencia de grandes batallas hasta la muerte para lograrlo y decir, ésta patria es nuestra… México es mío, en donde quiera que uno esté. Conmemoremos pues con respeto, agradecimiento, orgullo y conciencia, conduciéndonos con lealtad. ¡Sí!... lealtad, esa palabra olvidada y tan vital como parte de nuestro tejido social que va de la mano con el respeto. Siendo estos los valores más importantes y más valiosos que le podamos dar a nuestra patria como ciudadanos y no se diga como gobernantes.
Sí… la consigna más importante que debería estar escrita con el hierro al rojo vivo de la igualdad y justicia en el alma y mente de todo mexicano, sobre todo como político, es la de, “VIVE POR TU PAÍS”. Porque con esta consigna, la nación como un todo, sin egoísmo, sin intereses personales, ni trampas ni falsedades y corrupción política, ni mal uso del poder, tendremos al país que todo mexicano sueña.
Si tenemos respeto al pasado, a la victoria lograda por esos próceres, sus frutos valiosos de esa lucha, y si tenemos unidad y vivimos por el país, tendremos fuerza y poder ilimitados y buen cimiento para transformar para bien a nuestro México, sin luchas armadas ni derramamiento de sangre.
La revolución moderna de nuestro país se debe llevar a cabo por el pueblo y gobernantes armados de una filosofía llena de verdadera esencia humanitaria y sacrificio. La Independencia y revolución del México actual, es contra la invasión de políticos y gobernantes sin escrúpulos, saqueadores, hambrientos de riqueza y de poder. Un verdadero patriota hoy, se ubica en armarse y luchar. Armarse sí, pero de determinación, de buenos propósitos y de valores morales para gobernar con buena voluntad, lealtad y respeto al país y a los ciudadanos que brindaron su apoyo y confianza al depositar su voto, con esperanza de prosperidad. Nos armemos pues con estos principios y conjuntemos nuestras fuerzas y voluntades para el engrandecimiento de este pedazo de tierra que le llamamos patria empezando por nuestro trabajo, nuestra casa, nuestro municipio, y por nuestro estado, para que nuestro ejemplo sea digno a seguir. Pero actuemos de pensamiento, palabra y obra. Así como lo dice y hace nuestro apreciado Juan Sabines. “HECHOS NO PALABRAS”. Porque La saliva y las palabras huecas, jamás han levantado naciones en ninguna parte del mundo. “! VIVA MÉXICO AMIGOS ¡”
Hasta la próxima y recuerden: “NUNCA DEBE EL HOMBRE LAMENTARSE DE LOS TIEMPOS EN QUE VIVE, PUES NO LE SERVIRÁ DE NADA. EN CAMBIO, EN SU PODER ESTÁ SIEMPRE MEJORARLOS” (Carlyle)
Sí… la consigna más importante que debería estar escrita con el hierro al rojo vivo de la igualdad y justicia en el alma y mente de todo mexicano, sobre todo como político, es la de, “VIVE POR TU PAÍS”. Porque con esta consigna, la nación como un todo, sin egoísmo, sin intereses personales, ni trampas ni falsedades y corrupción política, ni mal uso del poder, tendremos al país que todo mexicano sueña.
Si tenemos respeto al pasado, a la victoria lograda por esos próceres, sus frutos valiosos de esa lucha, y si tenemos unidad y vivimos por el país, tendremos fuerza y poder ilimitados y buen cimiento para transformar para bien a nuestro México, sin luchas armadas ni derramamiento de sangre.
La revolución moderna de nuestro país se debe llevar a cabo por el pueblo y gobernantes armados de una filosofía llena de verdadera esencia humanitaria y sacrificio. La Independencia y revolución del México actual, es contra la invasión de políticos y gobernantes sin escrúpulos, saqueadores, hambrientos de riqueza y de poder. Un verdadero patriota hoy, se ubica en armarse y luchar. Armarse sí, pero de determinación, de buenos propósitos y de valores morales para gobernar con buena voluntad, lealtad y respeto al país y a los ciudadanos que brindaron su apoyo y confianza al depositar su voto, con esperanza de prosperidad. Nos armemos pues con estos principios y conjuntemos nuestras fuerzas y voluntades para el engrandecimiento de este pedazo de tierra que le llamamos patria empezando por nuestro trabajo, nuestra casa, nuestro municipio, y por nuestro estado, para que nuestro ejemplo sea digno a seguir. Pero actuemos de pensamiento, palabra y obra. Así como lo dice y hace nuestro apreciado Juan Sabines. “HECHOS NO PALABRAS”. Porque La saliva y las palabras huecas, jamás han levantado naciones en ninguna parte del mundo. “! VIVA MÉXICO AMIGOS ¡”
Hasta la próxima y recuerden: “NUNCA DEBE EL HOMBRE LAMENTARSE DE LOS TIEMPOS EN QUE VIVE, PUES NO LE SERVIRÁ DE NADA. EN CAMBIO, EN SU PODER ESTÁ SIEMPRE MEJORARLOS” (Carlyle)
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