Exigen reconexión de servicios básicos…
Pago de 160 mil pesos por daños y otros…
Lo único que piden en servicios para regresar a la comunidad…
Elio Henríquez
Siete familias evangélicas de la comunidad de Shulvó, municipio de Zinacantán, cumplieron hoy este martes, 80 días en plantón frente al Palacio de Justicia en esta ciudad, para exigir la reconexión de los servicios agua potable, energía eléctrica y teléfono, así como el pago de los daños por un monto aproximado de 160 mil pesos, informó el pastor Antonio Vázquez Méndez, presidente de la Alianza Ministerial en ese lugar.
Añadió que la semana pasada los afectados sostuvieron una reunión con autoridades estatales para tratar de encontrar una solución al problema, pero no se ha podido avanzar porque los católicos tradicionalistas de Shulvó pretenden que los evangélicos queden como “grupo independiente”, sin derechos ni obligaciones en la comunidad.
Dijo que los protestantes han rechazado la propuesta porque desean continuar siendo parte de la comunidad, realizar los trabajos comunitarios correspondientes y pagar las cooperaciones para las celebraciones que no tengan componente religioso.
Méndez Vázquez recordó que en febrero del año pasado los católicos tradicionalistas cortaron los servicios de agua, luz y teléfono a las siete familias protestantes, bajo la acusación de que se negaban a pagar las cooperaciones económicas para la celebración de fiestas religiosas.
Indicó que en noviembre pasado los católicos colocaron cercos de alambre para impedir que los evangélicos sacaran tres camionetas que utilizan para trabajar, pero después de varios encuentros, finalmente se logró que fueran retirados el pasado 25 de marzo para que los vehículos pudieran ser movidos.
“Lo que están exigiendo ahora para retornar a su comunidad es la reconexión de los servicios básicos y el pago de los daños que ascienden a 160 mil pesos, aproximadamente”, añadió.
Las siete familias se instalaron el 13 de enero pasado frente al Palacio de Justicia, donde han colocado carpas y fogones para protegerse del sol y la lluvia y cocinar sus alimentos; duermen en los corredores del edificio o en casas de campaña.
Familias de otras dos comunidades de San Cristóbal y Huixtán que habían iniciado el plantón junto con los de Shulvó, ya resolvieron sus respectivos problemas y retornaron a sus viviendas desde hace algunas semanas.
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