Hace falta fusionar lo político con lo social…
El neoliberalismo es arrasador en México y el mundo…
Un régimen político requiere de consenso social…
Elio Henríquez
El neoliberalismo es arrasador en México y el mundo…
Un régimen político requiere de consenso social…
Elio Henríquez
La crisis política que vive el país tiene sus raíces en lo social y es en lo social donde se va a resolver lo fundamental a partir de la creación de una nueva forma de hacer política, afirmó Sergio Rodríguez Lazcano, al presentar en esta ciudad su libro titulado “La crisis del poder y nosotr@s”.
“Lo que hace falta es fusionar lo político con lo social, para acabar con esa diferencia entre lo político y lo social; hace falta que lo que está pasando en el país logre encontrar una ventana, un vínculo entre lo político y lo social”, ante más de un centenar de personas acudieron a la presentación de la obra en las instalaciones del Centro Indígena de Capacitación Integral “Fray Bartolomé de Las Casas”-Universidad de la Tierra (Cideci-Unitierra Chiapas), que dirige Raymundo Sánchez Barraza.
Aclaró que la obra editada por ediciones “Rebeldía” no es un libro académico sino que “busca rastrear los signos que anuncian lo que va a venir; este es el objetivo central, que nos permita comprender lo que está pasando y lo que va a pasar”.
Rodríguez Lazcano aseguró que “es tan devastador lo que ha hecho el neoliberalismo en el mundo y en México que podíamos llegar a la conclusión de que simplemente se trata de una tierra arrasada. El país que hoy conocemos como México no tiene nada que ver con el que conocimos hace 15 o 20 años”.
Abundó: “Ese norte orgulloso y productivo desapareció. Tenemos estados del norte víctima de dos guerras, de dos ejércitos, dos fuerzas, y sobre todo su juventud víctima” de la violencia. “Incluso mucha gente está huyendo del norte. Como que se unificó hacia la baja. Desde el punto de vista del Estado el sur ya no es el sur rebelde porque aparentemente nada pasa, y el centro logró controlarlo la izquierda institucional y canalizar hacia mecanismos institucionales y desbaratar los procesos de auto organización social que se daban en la ciudad de México”.
Enfatizó que “parecería que estamos en tierra arrasada y que todos somos víctimas de una guerra que inició el gobierno contra el narcotráfico y que para nada está clara”.
Sostuvo que “en esta crisis, lo que se plantea en el libro es que las mediaciones entre el poder y la sociedad han sido también aniquiladas en mismo proceso de aniquilamiento de otras formas de organización del estado. Esa crisis de las mediaciones: partidos políticos, sindicatos, ONGs, organizaciones campesinas, etcétera que antes eran fundamentales para mantener la paz y la tranquilidad social hoy no juegan el mismo papel que antes porque no hay el mismo grado de legitimidad que llegaban a tener en un momento determinado”.
Manifestó que “si entendemos que un régimen político no se puede sostener únicamente con la guerra y la represión sino que requiere de elementos de consenso social, entonces entenderemos la dimensión de la crisis” que padece el país.
Junto a Mercedes Olivera y Jérôme Baschet Opinó que participaron en la presentación, y de Lázaro que moderó la mesa, opinó que “la crisis abre una posibilidad grandísima a la gente siempre y cuando la insumisión, la rebeldía y todos estos elementos se manifiesten y organicen porque no es posible hacerlo sino de manera organizada”.
El también director de la revista Rebeldía, agregó: “Yo creo que los compañeros del EZLN van a jugar un papel, lo creo, no lo sé, pero creo que también están esperando respuestas y procesos nuestros que les permitan evaluar poner en riesgo a las Juntas de Buen Gobierno o lo que han ganado hasta ahora”.
“Lo que hace falta es fusionar lo político con lo social, para acabar con esa diferencia entre lo político y lo social; hace falta que lo que está pasando en el país logre encontrar una ventana, un vínculo entre lo político y lo social”, ante más de un centenar de personas acudieron a la presentación de la obra en las instalaciones del Centro Indígena de Capacitación Integral “Fray Bartolomé de Las Casas”-Universidad de la Tierra (Cideci-Unitierra Chiapas), que dirige Raymundo Sánchez Barraza.
Aclaró que la obra editada por ediciones “Rebeldía” no es un libro académico sino que “busca rastrear los signos que anuncian lo que va a venir; este es el objetivo central, que nos permita comprender lo que está pasando y lo que va a pasar”.
Rodríguez Lazcano aseguró que “es tan devastador lo que ha hecho el neoliberalismo en el mundo y en México que podíamos llegar a la conclusión de que simplemente se trata de una tierra arrasada. El país que hoy conocemos como México no tiene nada que ver con el que conocimos hace 15 o 20 años”.
Abundó: “Ese norte orgulloso y productivo desapareció. Tenemos estados del norte víctima de dos guerras, de dos ejércitos, dos fuerzas, y sobre todo su juventud víctima” de la violencia. “Incluso mucha gente está huyendo del norte. Como que se unificó hacia la baja. Desde el punto de vista del Estado el sur ya no es el sur rebelde porque aparentemente nada pasa, y el centro logró controlarlo la izquierda institucional y canalizar hacia mecanismos institucionales y desbaratar los procesos de auto organización social que se daban en la ciudad de México”.
Enfatizó que “parecería que estamos en tierra arrasada y que todos somos víctimas de una guerra que inició el gobierno contra el narcotráfico y que para nada está clara”.
Sostuvo que “en esta crisis, lo que se plantea en el libro es que las mediaciones entre el poder y la sociedad han sido también aniquiladas en mismo proceso de aniquilamiento de otras formas de organización del estado. Esa crisis de las mediaciones: partidos políticos, sindicatos, ONGs, organizaciones campesinas, etcétera que antes eran fundamentales para mantener la paz y la tranquilidad social hoy no juegan el mismo papel que antes porque no hay el mismo grado de legitimidad que llegaban a tener en un momento determinado”.
Manifestó que “si entendemos que un régimen político no se puede sostener únicamente con la guerra y la represión sino que requiere de elementos de consenso social, entonces entenderemos la dimensión de la crisis” que padece el país.
Junto a Mercedes Olivera y Jérôme Baschet Opinó que participaron en la presentación, y de Lázaro que moderó la mesa, opinó que “la crisis abre una posibilidad grandísima a la gente siempre y cuando la insumisión, la rebeldía y todos estos elementos se manifiesten y organicen porque no es posible hacerlo sino de manera organizada”.
El también director de la revista Rebeldía, agregó: “Yo creo que los compañeros del EZLN van a jugar un papel, lo creo, no lo sé, pero creo que también están esperando respuestas y procesos nuestros que les permitan evaluar poner en riesgo a las Juntas de Buen Gobierno o lo que han ganado hasta ahora”.
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